Hoy hablamos sobre el taller de «Huerto y Terapia» que iniciamos a comienzos del mes de abril. Este taller ha resultado ser una actividad significativa para la gran mayoría de nuestros residentes, ya que muchos de ellos han tenido experiencia previa en la jardinería o en la agricultura cuando eran jóvenes, bien sea por trabajo o por afición.

Durante este taller, nuestros residentes han tenido la oportunidad de cultivar plantas y flores, y disfrutar de todo el proceso de siembra. Este proceso ha tenido una serie de beneficios para ellos, no solo a nivel físico, sino también mental y social.

En cuanto a los beneficios físicos, el taller de «Huerto y Terapia» ha permitido a nuestros residentes mantenerse activos, habilidosos y potenciar su movilidad y fuerza. Además, ha fomentado la concentración y la paciencia, al participar a lo largo de todo el proceso, desde la siembra hasta la cosecha. Esto ha permitido mejorar la autoestima de nuestros residentes, al ver el resultado final de su trabajo y poder disfrutar de los alimentos de su propia cosecha.

Por otro lado, este taller también ha facilitado la sociabilización entre nuestros residentes, ya que se han intercambiado consejos y opiniones sobre el propio huerto, además de tener la oportunidad de trabajar en equipo para lograr una meta común compartiendo entre ellos todo lo que sabían sobre el tema gracias a sus propias experiencias y habilidades.

A continuación, les mostramos algunas fotos durante la actividad del riego, para que puedan observar la participación de algunos de nuestros residentes y el progreso de nuestro huerto y las flores plantadas.

¡Y ahora, los animamos a que comenten y adivinen qué hemos plantado en las maceteras de nuestro huerto! En Centros Buendía estamos comprometidos en brindar actividades significativas y enriquecedoras para nuestros residentes en los que puedan disfrutar y mejorar sus habilidades, y el taller de «Huerto y Terapia» es solo una muestra de ello.